Rincón Memorial, fotografías de Francisco Suárez

 

Rincón Memorial

Por: Francisco Suárez

El trabajo trata de poner en escena objetos que sean detonantes de la memoria, en este caso son objetos personales y encontrados. El objeto, tanto personal, como encontrado, posee una gran cantidad de connotaciones adquiridas u otorgadas por mí, y por su dueño o dueños anteriores, que muchas veces son producto de diferentes circunstancias. Así el objeto llega a convertirse en un detonante de la memoria, se carga y hace portador de la misma.

Elegí este trabajo ya que la propuesta fue la de elegir un tema personal y desarrollarlo. Al comienzo el proyecto se armó de diferente manera, y conforme iba avanzando el proceso se suscitaron una serie de incógnitas y cambios no programados que me ayudaron a enfocar mi proceso y mi producto en lo que realmente iba a ser.

Elegir la memoria y la puesta en escena como partes claves del proyecto fue importante. Primero que entablar a la memoria como una manera de recordar y tener presente todo, o al menos saber que existe, existió, sucede o sucedió. Así se crea la puesta en escena que es de ayuda a la memoria, puesto que al estar constituida netamente de objetos subjetivos y de gran poder ayudan a este trabajo. Los objetos son cotidianos de manera física o no, puesto que aunque este presente dentro de un espacio “real”, pueden además estar presentes en el subconsciente, en la mente de cualquiera. Se constituyen en algo rutinario, diario. Decidí ponerlos en escena para que cuenten una historia, que puede ser la que han contado todos estos años, o no.

Las fotografías se toman con un celular, mi celular, que se constituyó en una herramienta bastante fuerte para ese entonces, de todo tipo de registro, de texto y fotográfico. Además el celular es un objeto de uso personal y bastante íntimo, que a la vez te hace público. Es un número asignado para uno, con el que cualquiera nos encuentra, sin embargo es íntimo ya que desde solo uno tiene acceso al mismo. Además las llamadas, mensajes de texto, etc. que se reciben en el aparato son de uso netamente personal. Las fotos estaban impresas en tamaño postal, tratando de simular una foto de sala, o una foto de lo más cotidiana. Quiero decir, traté de simular la foto de álbum, o la de portarretratos, que por lo general son fotografías que enmarcan sucesos que son importantes para una persona, familia, institución. Las fotos están en una instalación que simula una esquina de casa con una mesa, en las que por lo general encontramos este tipo de fotografías antes mencionadas. Se convierte en una especia de altar de la memoria, que esta vez se enmarca con las fotografías de los objetos.

Contacto del artista: pashu69@hotmail.com

Comentarios

  1. Tengo una duda sobre esta obra, pues el comentario anterior me trajo muchas ideas a la cabeza.. Es esta obra realmente un intento de exorcismo?(entendiendo por exorcismo tal y como se expone en el comentario de David, un intento de eliminar cualquier rastro de acontecimiento relacionado a este), o mas bien una manera de reflexión hacia el poder simbólico de nuestra realidad? (cosificada, claro), pues llegando mas a fondo con esta idea de eliminar cualquier rastro «humano» de la cosa… que termina siendo esta?, para que quisiera yo que una cosa deje de reflejarme?. Hasta hace poco pensaba también, que cuando uno se despoja de lo material crece, que de a poco se puede llegar a ser un «iluminado» pero ahora mas bien es en una cosa, la mas sencilla, de donde parto para poder viajar a donde mi cuerpo (otra «cosa» por cierto) no me lo permite…. En fin creo que no llego a nada con esto, solo para terminar.. (y seguramente esta frase final explique mejor mi punto de vista) No pagaría a Francisco Suárez para que exorcice mis recuerdos hechos cosa, sino mas bien para que detone en mi toda una vida, la cual se encerró en esa pequeña cosa, viajar de nuevo a ese instante.

    Espero con esta idea espontanea colaborar con Panchito, a quien por cierto felicito por esta particular sensibilidad con la que trata al mundo, suerte en tu exposición, nos veremos ahí (iré para detonarme).

  2. Francisco Suárez bien puede ser un alma que limpia a las mentes de lo innecesario. Me explico, Rincón Memorial explica un posible exorcismo de las cosas:

    -El artista acepta que detrás de las cosas hay un algo, un recuerdo, una serie de acciones pasadas que encuentran su materialidad, su trascendencia en un objeto.

    -Me recuerda que hay gente que guarda cosas, incluyendome, con alguna esperanza en el futuro, como que queriendo trascender; y así las cosas, como esa parte de la mente que se llama esperanza o ilusión se van llenando hasta el estado de ansiedad, y esque nada de lo que se guarda tiene sentido… al final final.

    -Me acorde de Rincón Memorial ahora que no puedo deshacerme de las cosas, y la razón de esa resistencia me es incierta. Solo son cosas.

    -Francisco Suárez puede ser un profesional,¡si!, un profesional pagado y que está en las páginas amarillas para que la gente que no puede deshacerce de las cosas pesadas paguen por un exorcizador de cosas, alguien capaz de hacer que las cosas vuelvan a su escencia mineral, que las cosas sean mera sustancia y así la mente se libere, flote y se ilumine.

    Jesús decía que es más fácil que un camello pase por el ojo de un aguja a que alguien se deshaga de las cosas que tiene, de las más importantes. Tiene razón. Otra persona dijo que los mendigos son los dueños del mundo…

    Que puta sociedad capitalista de acumulamiento…

    A ver si alguien me explica.

    Volviendo al punto: Francisco Suárez está bien.

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