El no lugar del atrevimiento delfiniano (¿Quién lo hizo y por qué lo hizo?)

Por Santiago Rosero C.

En la era de la información las novedades mediáticas circulan con la misma velocidad con la que las innovaciones tecnológicas se inmiscuyen en la cotidianidad de la gente.

La diferencia está en que la adaptación de los individuos a los instrumentos, la creación de relaciones (o conexiones, como se empieza a denotar en esta era) eficientes entre ellos, la adecuación de los sujetos a los nuevos aparatos y la comprensión de sus códigos y usos toma más tiempo del que demoran los dispositivos en conquistar las actividades de la vida.